Iniciar tu negocio implica enfrentar responsabilidades y desafíos. Unas de las características primordiales de un emprendedor o emprendedora son las habilidades, experiencia y conocimiento del negocio al que se va a enfrentar. Es decir, si se elige emprender dentro de un campo donde tenga experiencia laboral, práctica del negocio, vínculos sociales y familiares, la probabilidad de éxito será mayor; debido a que dichas características pueden ayudar a que surjan circunstancias favorables en el proyecto en mente.

Por otro lado, un proyecto nuevo implica un plan de negocio, un estudio de mercado, saber los recursos con los que se cuenta, interés sobre el producto, entre otros aspectos para no perder la visión del giro. La repostería es un mercado de mucha demanda en muchos países del mundo y a pesar de que se ha declarado que la población sufre de sobrepeso, también se han generado ideas de repostería bajos en calorías o se han implementado diversos ingredientes o recetas para generar postres con un mínimo nivel de azúcar.

Primero, se debe saber el tipo de producto a vender para poder identificar al cliente potencial y cómo se hará la creación del negocio. Se puede empezar con preguntas básicas como: ¿A quiénes venderé?, ¿Cómo venderé mis productos?, ¿Cuáles son mis productos estrella?, ¿Qué productos considero que pueden causar impacto en mi cliente?, ¿Dónde se distribuirán?, etc. Preguntas que ayudarán a seleccionar la opción más adecuada de venta. Estos puntos también pueden tomarse como fuente de referencia para una estrategia de negocio.

La repostería es una fuente alimenticia de gusto para muchas personas, así que puedes empezar con un pequeño estudio de mercado con las personas que te rodean. La preparación de muestras para la degustación de diferentes paladares, te dará una idea del impacto del producto en las personas. No te limites a un solo sector, ya que podrías tener mayores ideas de negocio si conoces las impresiones de niños, jóvenes y adultos sobre los productos.

Dentro de la creación de un negocio propio es importante hacer un análisis de los recursos financieros con los que se cuenta. Con base a un recurso se podrá identificar el acceso a la materia prima del producto potencial, ya que este será la base del negocio. Una buena materia prima puede ayudar a que el producto sea de mejor calidad o, en su caso, mejorarlo.

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